Confieso que soy niño,
que aún vuelan cometas por mis calles.
sin que mis ojos logren atraparte.
Confieso que no leo, que nací ciego,
que soy reflejo de un sol que apenas arde.
Confieso que fui sueño, chispa, hoja al fin
que se apagó al incendiarse;
que en el vuelo perdí las alas
que olvidé el espesor de tu sombra.
Confieso que no soy yo, que soy el otro
que no encuentra la palabra exacta
para decirte que estos versos
los hize buscando la esperanza.
6 comentarios:
confieso que tus letras me agradan, que son como el roció para el alma, tienen su propia musicalidad, su propio sentido... que no agraden a algunos, no quiere decir que sean malos, me gustan a mí..y a muchos...tienes que tener en cuenta que no todos es la voz de uno...
posdata: Me prometiste darme tu libro, espero que me lo traigas para el sábado. creo que seria bueno comenzar con temas puntuales, analizando un poema o dos por tertulia...
Confieso que soy viejo, que sé escuchar el rugido de otras avenidas. Confieso que me duele la letra que muero por ella a pesar que en ella vivo.
Ayer pasé por tu espacio. Leí tus poemas. Quise comentar algo pero parace que están bloqueados a esta opción.
Posdata: El libro lo tengo en mano.
Amigo Elmer:
Realmente es un poema muy intenso el que has escrito. Tiene mucho de una nueva voz: propia, sin aspavientos ni retoricas, con brillo pero sin adornos. Me gusta!
mmm aun soy novato en esto de blogs... a ver si me ayudan un poco!
Massiel no eres novato, solo que tu tiempo está disperso en otras latitudes. Nos fallaste el sábado.
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